Dónde alojarse en Bruselas, Bélgica

La Grand Place (Grote Markt en flamenco) es sin duda el lugar más hermoso de Bruselas.

La Grand Place es una colección de edificios góticos típicos de la arquitectura del norte de Europa. En ella se encuentra el Hôtel de Ville (Ayuntamiento) y su torre de 96 metros, visible desde muchos puntos del centro histórico de la ciudad. También en la Grand Place se encuentra la Casa del Rey y muchos otros edificios rematados en oro como la casa de los duques de Brabante, el rey de España y las antiguas sedes de muchos de los gremios más poderosos de la Bruselas medieval.

No muy lejos de la Grand-Place se encuentran las galerías reales Saint-Hubert, un mercado cubierto con un gran techo de cristal construido a principios del siglo XX. Este elegante centro comercial alberga muchas tiendas, incluyendo chocolaterías, boutiques de ropa de diseño y tiendas de souvenirs.

Otros atractivos de la zona incluyen los Museos Reales, el Museo Magritte, varias casas de chocolate típico y el famoso Manneken Pis.

El casco histórico de Bruselas destaca por su belleza, sus numerosos museos y por ser un área extremadamente fácil para movilizarse a pie.

El centro histórico, particularmente en las inmediaciones de la Grand-Place, es la mejor zona donde alojarse en Bruselas. Para trasladarse a otros rincones de la ciudad, es particularmente útil la estación de metro Bourse (líneas 3 y 4).

Ixelles (Elsene en flamenco) es el centro de la vida cultural de la ciudad de Bruselas.

Ixelles es un distrito de contrastes situado en el sureste de Bruselas, en la corona central de la ciudad.

Si bien la zona más céntrica de Ixelles está a menos de 20 minutos de la Grand-Place, oficialmente se trata de una entidad separada de Bruselas. La ciudad de Ixelles empieza cerca de las arterias comerciales de Porte de Namur y se extiende al sudeste hacia las áreas más boscosas de la Abadía de Cambre.

Se trata del barrio estudiantil por excelencia de Bruselas. Acoge la Universidad Libre de Bruselas, que reune a estudiantes, artistas e intelectuales. Aquí vivieron Audrey Hepburn, Karl Marx y el general Boulanger.

Ixelles es una comuna llena de historia que reúne barrios muy diferentes. Con sus numerosos teatros y cines, es el lugar de vida nocturna y el centro cultural de la ciudad. El distrito de Porte de Namur y el lujoso Golden Fleece, con sus grandes boutiques y tiendas de lujo, se pueden considerar como el segundo centro de Bruselas.

Este barrio tiene la estación de metro Porte de Namur. En los lindes de Ixelles, se puede llegar a las estaciones Louise y Throne que también están en el “Petite Ceinture” o (pequeño cinturón) del metro de Bruselas.

El barrio europeo de Bruselas, anteriormente llamado Quartier Léopold se encuentra al este del Centro Histórico de la ciudad y está delimitado por la place du Luxembourg, place Jourdan, la rond-point Schuman y la place Jean Rey.

Es uno de los distritos más elegantes y modernos de la capital belga. Alberga plazas animadas, tiendas originales, amplios espacios verdes, museos y, como no podía ser de otra manera, una oferta interesante de edificios sede de varias instituciones europeas.

El barrio europeo de Bruselas es el hogar de distintas perlas arquitectónicas. Varios detalles art decó y art nouveau se pueden admirar en las plazas, los edificios como la casa Saint-Cyr, la casa Cauchie, o los gigantescos edificios del Parque del Cincuentenario son algunas de las atracciones destacadas del Barrio Europeo.

Leopold Park alberga un patrimonio arquitectónico único, que incluye la magnífica Biblioteca Solvay y el Edificio Eastman, sede del Museo de Historia Europea. Muy cerca se encuentran el edificio Berlaymont, el edificio de Europa y el Residence Palace, todos en art decó.

El Quartier Européen está conectado por diversas paradas de metro (Maelbeek, Schuman, Arts Loi) y tren (Bruxelles Luxembourg).

Sus grandes espacios verdes, la presencia de las sedes de la Unión Europea y la riqueza arquitectónica del distrito, convierten al Quartier Européen en una de las mejores zonas donde alojarse en Bruselas.

Saint-Gilles es una de las 19 comunas de Bruselas y se encuentra en el centro sur de la capital.

Saint-Gilles pasó a ser la comuna popular de vlase obrera a ser uno de los distritos más codiciados de la ciudad.

Los barrios de Saint-Gilles son más elegantes o más populares según estén en la parte superior o inferior de la ciudad. La proximidad de la Avenue Louise y el Boulevard de Waterloo representan la parte más chic de la zona, mientras que el área alrededor de la Gare du Midi es más clase obrera y con una alta concentración de comunidades extranjeras.

El distrito de Saint-Gilles es apreciado por jóvenes que buscan alimentar su vida social y cultural. La explanada de Saint-Gilles y sus cafés y bares están siempre llenos. A pocos pasos se encuentra el centro cultural Jacques Franck. El área alrededor de la Maison Communale, lleno de encanto, tiene muchos restaurantes. La avenida Louise y sus tiendas no están muy lejos.

Saint-Gilles es el barrio hipster de la ciudad y una excelente zona para alojarse en Bruselas para viajeros jóvenes. Esta comuna también concentra buena parte de los alojamientos económicos de la capital belga.

Molenbeek es una comuna al oeste del centro de la ciudad.

Molenbeek es uno de los barrios tradicionalmente más proletarios de Bruselas, ha sido el hogar de inmigrantes a lo largo de los siglos.

Conocido por los lugareños como Molen, este barrio se encuentra junto al canal de Bruselas. A lo largo del canal, en el lado de Molenbeek, se pueden ver coloridos molinos de viento que giran en la brisa. Molenbeek, proviene de una combinación de palabras flamencas, y puede ser traducido al castellano como “molinos de arroyo”.

Al igual que Saint-Gilles, Molenbeek es un barrio en constante transformación. Joven, alternativo y de marcado caráter étnico, este barrio se gentrifica rápidamente.

El recientemente inaugurado Museo Iconoclasta MIMA. Fundado en abril de 2016 junto al Canal de Bruselas, la misión del MIMA es ser el museo que define el arte contemporáneo. El MIMA presenta el arte más significativo de su tiempo y explora una historia de la cultura 2.0.

Molenbeek también ofrece una amplia gama de sabores del mundo: restaurantes, aperitivos, salones de té, cafeterías, pasteles.

A pesar de su reputación de barrio rudo, Molenbeek ofrece al visitante una mirada al movimiento hipster de Bruselas.